Galicia e os galegos na poesía castelá CIV. Ángel García López

angel-garcia-lopezRomán Arén. Ángel García López naceu en Rota en 1935 e comezou a súa prolífica andaina de poeta en 1963 con Emilia es la canción, volume ao que seguiron Tierra de nadie (1968), A flor de piel (1970), Volver a Uleila (1971), Elegía en Astarot (1973), que foi Premio Nacional de Literatura, Retrato respirable en un desván (1974), Mester Andalusí (1978), co que gañou o Premio da Crítica Española, Auto de fe (1979), Trasmundo (1980), Santo oficio (1981) e outros trece títulos no século XX, e xa no XXI destacan os poemarios Cancionero de Alhabia (2002) e Universo Sonámbulo (2006). Admirador de Rosalía de Castro, dedicoulle dous poemas, do que ofrezo “Nunca humanos ollos viron/o que viu entonces ela. Rosalía de Castro”; do poemario de 2006:

Angel García López 5Este mar vio tu cuerpo y selló su evidencia,/distinto torreón, sitio nuevo del cielo./Desde entonces no duerme nunca ya,/pues conoce la voz de tu marea y jamás ha vivido/de sueño más perverso que ofrecerte/estas dunas que llaman Corrubedo y que tienen su nombre./ Que sólo son arena, onduladas terrazas/de crestas diminutas hoy, por ti, ya de oro./Junto a ti nace el junco y esa flor que a ti huele/y en su aroma te explica. La fala aquí gallega/de los verdes meandros donde el mundo se escinde/y acerca Finisterre y en su faro agoniza/con luz semiapagada, sin mentir, del oeste./La pleamar que hoy confunde para ser nuevo origen/de pálidos contornos donde olí las gardenias/y pétalos con nombre y un carballo y un tilo/que en sílice respiran hasta ser todo el monte.

O poema foi reproducido en 2008 no folleto Poetas con Rosalía III, onde tamén figura a famosa “Cançó tópica de les dones gallegues a Rosalía” de Salvador Espriu, ademais doutros poemas de autores galegos e ilustrado por Baldo Ramos.

Un comentario en “Galicia e os galegos na poesía castelá CIV. Ángel García López

  1. Bos días, Román:
    Es muy agradable ver que gente de fuera de Galicia valora a los nuestros. Presenciar tan hermosa defensa de la memoria y de los versos o prosa de nuestra Rosalía, te hace esbozar una sonrisa complaciente ya de mañana.
    Meterse de lleno en una obra de Rosalía, adentrarse en todos esos elementos que constituyen sus textos – personajes, paisajes, etc…- se te pasa el tiempo abismada en su lectura y lo que sientes al leerla es de difícil calificación. ¡Ay ! si una pudiera disfrutar por más tiempo de su lectura… Pero, tengo mis quehaceres esperándome.
    Besiños palmeiráns, Román.

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